PREPARACIÓN DEL POSCA

Agite bien el marcador de arriba abajo con el capuchón cerrado para que la bola al moverse (oirá su característico ruido) homogeneice el color dentro del POSCA.

CARGAR Y PROBAR EL MARCADOR

En una hoja de papel distinta del soporte de creación, presione la punta varias veces hasta que quede suficientemente impregnada de pintura. Para verificar la cantidad de pintura, pruebe primero el marcador sobre el borrador: si el trazo es neto, el POSCA está listo para su uso. Tenga a mano un paño, ya que puede ser útil para limpiar fácilmente la punta o absorber la pintura sobrante.

RECARGAR

Si durante la realización de la obra el marcador va perdiendo fuerza, vuelva a agitarlo teniendo cuidado de cerrar previamente el capuchón para evitar las salpicaduras de pintura. Así de fácil: ¡recargar y seguir pintando!

LIMPIAR

Puede limpiar la punta del marcador con agua del grifo con la frecuencia que necesite. Si la punta está demasiado seca, incluso puede dejarla en remojo en agua toda la noche.

Si una punta se ha secado (marcador mal tapado, por ejemplo), sumérjala en un vaso de agua unas horas para poder utilizarl

ACUARELABLE

La pintura POSCA es acuarelable: se puede diluir para obtener un efecto degradado.

La operación se efectúa antes del secado: con un cepillo previamente mojado en agua, trabaje directamente la pintura sobre el material hasta obtener el acabado deseado.

MISCIBLE

Mientras la pintura esté húmeda, se pueden mezclar los colores sobre el soporte con la punta o con un pincel y crear así infinitos tonos. Si la punta está manchada, límpiela y cargue de nuevo el marcador para restablecer el color original.

UPERPONIBLE

La pintura POSCA, densa y cubriente, es ideal para las superposiciones.

Los colores oscuros se pueden aplicar sobre colores claros y viceversa. Y, gracias a su secado rápido, se pueden realizar fácilmente superposiciones sin rebosaduras.

USO INTERIOR Y EXTERIOR

USO INTERIOR Y EXTERIOR

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